Una de las cosas que me encantan en estos paises del norte es la típica House party. Yo eso ya lo viví en mi año erasmus, en Montpellier, cuando los fines de semana nos dedicábamos a ir de fiesta en fiesta, de casa en casa. Y es que es una manera de divertirse de lo más curiosa. De repente una casa, que esta concebida para un determinado uso (vivir en ella, claro está) se convierte durante unas horas en un pub o discoteca, o lo que sea que sirva para meterse dentro y liarla. Las habitaciones cambian su uso, de repente el salón se convierte en la sala mas animada, la cocina se convierte en la barra de la discoteca, el balcón en zona de fumadores y las habitaciones en reservados para quien le apetece estar más tranquilo. Ni que decir tiene que la puerta del cuarto de baño se llena de gente apelotonada, haciendo cola para vaciarse y poder volver a la barra a beber.
Pues bien ayer estuve en un par de esas fiestas y la verdad es que ninguna tuvo desperdicio. La primera fue en Old Street, en casa de un noruego. Mogollón de platos para picar, alcohol (en esta no había en grandes cantidades. Era más tranquila), gente de unos cuantos paises.........música buena y conversaciones interesantes. Conocí a un montón de gente y estuve hablando por los codos, como es mi costumbre (con mi ya mejorado inglés).
Hacia las 10 de la noche nos cogimos el metro, el autobus y los miles de medios de transporte que hay que usar aquí para llegar a los sitios y nos fuimos a la segunda fiesta. Esta fue en Chelsea (el barrio pijo, se podría decir). Y esta si que era una house PARTY, porque, señores, ahí no cabía ni un alfiler. Por supuesto los anfitriones eran españoles, que ya se sabe que una fiesta española no tiene rival..........La gente rebosaba por las puertas, se esparcía por los pasillos y se apelmazaba en la cocina, en la que había una mesa llena de todo tipo de bebidas alcohólicas. El balcón estaba a punto de desprenderse del edificio del peso que estaba soportando, pero la gente seguía saliendo a tomar el fresco (o a llenarse los pulmones de humo, según el caso). Hablé por los codos, los cuales también empiné en repetidas ocasiones y me lo pasé como los indios. Si es que a mi una fiesta.....ya se sabe.
El final de la historia era de esperar......6 denuncias y la policia que venía a echarnos de allí, pero mereció la pena la ilegalidad............................bendita fiesta.
3 comments:
pues si, yo tb he estado en bastantes fiestas de estas, solo ke las mias eran en ferrara y no se distanciaban mas de 50 metros unas de las otras, pero aun asi son de puta madre. Al principio de curso, cuando llevaba alli un mes y medio o asi, fui a una fiesta en una casa de dos plantas y un jardin, bastante bonito la verda, y a mitad de la fiesta un italiano salio al balcon ke daba a quel giardino y canto una cancion de ska-p enterita, no recuerdo cual pero fue bastante curioso. Horas despues yo tb habia empinado el codo demasiado carmela, asi ke si ke es verdad.... bendita fiesta.
Pues yo el sabado tambien estuve en una fiesta por el estilo. Y hace un par de semanas tambien. Siempre sale uno de ahi con numeros de telefono que luego a veces no usa... o a veces si...
Hola.... ¿Se puede? Era sólo para saludar, y preguntar por salud, y esas cosas, jeje. Besos.
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