Como en los últimos días no he salido ni al tranco de la puerta (debido a una desagradable bronquitis y a un examen que está ya acechando), no tengo mucho que contar. Podría relataros algunas historias que me quedan en el tintero, pero eso sería emplear demasiado tiempo de estudio contando mis cosas y no creo que sea muy responsable suspender un examen por el simple hecho de actualizar un blog.
Así pues, se me ha ocurrido hacer una lista con algunas cosas que no soporto. Y el hecho de hacer la lista no va a hacer que esas cosas desaparezcan, pero al menos si las comparto puede que las soporte un poquito más.
Ahí va:
1. No soporto despertarme cinco minutos antes de que suene el despertador (esos cinco minutos terminan siendo absolutamente agónicos). Esta es clásica.
2. No soporto terminarme un café sin darme cuenta y cuando vuelvo a beber, creyendo que aun queda café, ver que no queda ni una gota.
3. No soporto ver un cuadro torcido, ni una mesa que no cuadre con las losas del suelo (sí, es enfermizo, lo sé).
4. No soporto ir a buscar algo a una habitación y no acordarme cuando llego de qué cojones estaba buscando.
5. No soporto volver a donde estaba y acordarme de lo que buscaba antes.
6. No soporto meterme en la ducha y ver, cuando salgo, que se me ha olvidado la toalla.
7. No soporto ver en el porta-papel higiénico el jodido cilindro de cartón.
8. No soporto dormir con los pies dentro del edredón.
9. No soporto tener las manos sucias.
10. No soporto estar esperando el autobús, sin saber cuando llegará, preguntándome a cada minuto si no sería mejor ir andando y con la lucha interior de "ya que he esperado media hora no me voy a ir". Y al final terminar absolutamente esclavizada por la incertidumbre y fumándome un paquete de tabaco, pensando que, por la ley de Murphy, el autobús llegará cuando enciendo cada cigarro. Pero, señores............el autobús nunca llega, lo que llega es la bronquitis que tengo yo ahora.