Recuerdos cortos (volumen VIII)

"El día granadino en el que salí creyendo ingénuamente que sólo me tomaría una caña y terminé de fiesta con dos amigas (de las más locas que tengo), una pareja cincuentona, un tío con un descapotable, un cubano, dos franceses que flipaban pepinos violetas y yo misma con el alma cargada de ginebra, tónica y alegría andaluza. El resto de la noche, aunque con ciertas lagunas, se desenvolvió de la manera más absurda posible y terminó con un momento apoteósico en el que nos perdimos dentro de un parking del que tuvimos que salir y volver a entrar para poder rehacer el camino correcto hasta el coche que nos alojaría el sueño"



Recuerdo dedicado a mi Palo y a mi Lola, con las que no he vivido una, sino MIL noches como esta, durante casi diez años y los que hagan falta de más.

B
o
n
i
t
a
s


Y buenas tardes, señores y caballeras, y que digo yo que qué grande es todo lo absurdo y que qué más grande todavía es tener buenos amigos...