Recuerdos cortos (volumen IX)

"La madrugada londinense en la que, volviendo a casa en taxi tras una supermegafestiva jornada, mi amigo David decidió, para según él ahorrarle tiempo al taxista en su carrera, abrir la puerta y lanzarse del vehículo en cuestión (y presumo que por poco no lo hizo en marcha) a un recién estrenado estilo de cabeza al asfalto."



Yo aún me pregunto la razón que le llevó a tomar semejante  decisión  (aparte de la propiamente etílica), pero cada vez que materializo la imagen en mi mente vuelvo a reir como una loca....

Qué bonitas son las fiestas, qué bonitos los veranos y qué arte tienen los zaragozanos!

Y buenas tardes domingueras, señores y caballeras......

Dedicado a mi querido David, alias "a veces puedo volar"...